Un nuevo yo

Un nuevo yo

Siempre me he sentido especial, diferente a los demás, aunque no literalmente, claro. pero el otro día pasó algo extraño mientras veía la televisión en el salón. Entré en una especie de trance, no se muy bien cómo explicarlo, simplemente sentí que flotaba, una sensación de liberación.

Han pasado ya unos días y aún no se lo he contado a nadie, principalmente porque solo existen dos posibilidades: primera, que me encierren en un manicomio, y segunda que  se rían de mí porque no me creen o bien para que no vea lo que realmente están pensando de mi.

Esa sensación no a vuelto a visitarme pero no he podido evitar de pensar en ello, como un par de enamorados que se llaman por la noche y pasan en el día entero juntos.

Sin embargo, hoy al despertar casi grito de espanto: para empezar no permanecí tumbada en la cama como cuando me fui a dormir. Sino que levitaba, flotaba sobre ella.

Estoy bastante preocupada (y aterroriza), es lunes, por lo que he de ir a clase y sinceramente no me apetece que nadie vea como alzo el vuelo mientras resuelvo problemas de mates. Por suerte no ha pasado nada, excepto que casi echo a volar en medio del patio en educación física, mientras corría.

Pero he decidido no darle importancia porque nadie lo ha visto y porque dado que parece que ese poder, por llamarlo así, se quiere quedar conmigo, aprenderé a controlarlo.

No sea que un día me vean por ahí volando y me encierren para realizar pruebas y experimentos, como en las pelis.